Las fundas dentales han recibido muy buenas críticas y cada vez son más demandadas, en gran parte debido a los excelentes resultados que proporcionan. Estos elementos son, como su propio nombre indica, fundas fabricadas a medida con las características individuales de cada paciente, de manera que puedan encajar a la perfección en su dentadura. De esta manera, se cubren los dientes que han sido dañados o que se encuentran directamente afectados por algún tipo de dolencia. De esta manera, no solamente se recupera la funcionalidad de la sonrisa, sino también la apariencia de la misma. Las fundas dentales están especialmente recomendadas para todas aquellas personas que tengan algún tipo de problema de carácter bucodental leve, o por temas que sean únicamente estéticos.
Tipos de fundas dentales
Existen distintos tipos de fundas dentales, las cuales se clasifican generalmente en el tipo de material con el que hayan sido fabricadas. Cuál de todas escoger depende única y exclusivamente de cada paciente, así como de sus preferencias y de su caso particular. No obstante, es importante tener en cuenta que dependiendo de dichos materiales, tanto la estética de la sonrisa como el precio de las fundas pueden variar. A pesar de ello, se debe tener en cuenta que independientemente de cuál de todos estos tipos se escoja, estos cumplirán con sus objetivos, no solamente en lo que respecta a nivel funcional, sino también en la estética de la dentadura del paciente.
Porcelana
La porcelana es uno de los materiales más estéticos que existen, ya que tienen una tonalidad que imita a la perfección el color natural de los dientes. Por norma general, estos se suelen utilizar para aquellas piezas dentales que son más visibles, pues lo cierto es que no son tan resistentes como otras fundas. Además de estas, existe otro tipo que mezcla la porcelana con el metal, las cuales cuentan con algo más de resistencia, y son más duraderas en el tiempo. No obstante, e incluso habiéndose utilizado durante bastante tiempo, en la actualidad esta combinación de materiales no suelen verse en los pacientes, pues tanto ellos como los dentistas son partidarios de utilizar otros componentes más estéticos.
Zirconio
Las fundas de zirconio son otra de las alternativas que también se encuentran bastante demandadas en la actualidad. Este material blanco es altamente resistente, más que la porcelana, además de que también cumple con su función estética a la perfección. Sin embargo, tiene un punto negativo, y es que los resultados finales no tienen un aspecto natural, por lo que algunos pacientes suelen decantarse por las fundas de porcelana. En este caso, las fundas de zirconio sí que suelen utilizarse en los dientes posteriores, ya que a pesar de que no son tan estéticos, son lo suficientemente resistentes como para poder proteger estas piezas dentales.
Silicato
El silicato es un tipo de material cerámico muy resistente, y el cual también es uno de los componentes que se utilizan para crear fundas dentales. Esta alternativa es altamente estética y sobre todo, increíblemente resistente, además de que la tonalidad es muy parecida al aspecto externo de las piezas dentales. Estas restauraciones están completamente libres de metales, y garantizan a los pacientes una durabilidad bastante amplia debido precisamente a su resistencia. Por supuesto, también cuentan con una amplia gama de colores que se pueden adaptar a los dientes de cada paciente a nivel individual. Estas fundas dentales normalmente se recomiendan a aquellas personas que requieren de una rehabilitación de puentes fijos de más de 3 dientes.
Las fundas dentales están pensadas para perdurar mucho tiempo, sin embargo, deben cuidarse mucho, como el resto de la dentadura, para evitar más perdidas dentales.
Fundas dentales antes y después
Las fundas dentales se han convertido en una alternativa ideal para poder solventar cualquier fallo o imperfección que tenga la boca, no solamente a nivel estético, sino también en lo que respecta a la funcionalidad de la misma. Además, la tecnología ha logrado que se hayan producido gran cantidad de mejoras con el paso de los años, lo que hace que las fundas dentales cada vez sean más efectivas. Por supuesto, cuentan con la ventaja adicional de que a la hora de colocarlas no es necesaria ningún tipo de preparación previa, ni tampoco es necesario realizar una actividad específica después del tratamiento. No obstante, el profesional encargado de la colocación de la férula sí podría indicar al paciente una serie de pautas que debe seguir para que las fundas puedan cumplir con sus funciones en su totalidad.
¿Cómo se colocan las fundas dentales?
A la hora de proceder a la colocación de las fundas dentales, es importante seguir una serie de pasos para que el proceso sea completamente exitoso:
- Primero, es importante tomar las medidas de la boca del paciente para poder realizar el tallado antes de colocar la funda. Así, se consigue asegurar que esta va a poder adaptarse a la boca del paciente sin ningún tipo de problema.
- Una vez se toman las medidas, es importante hacer una prueba primero para poder determinar la tonalidad exacta y los contornos. Posteriormente, y si todo se encuentra en orden, se podrán enviar todos los datos a los laboratorios para comenzar la fabricación de la funda. Mientras se inicia este proceso, el paciente recibirá una funda provisional para no interrumpir su rutina diaria.
- Por último, y una vez se ha confeccionado la férula, el dentista será quien se encargue de colocar a través de un pegamento específico.
Es importante tener en cuenta que en algunos casos concretos, estos pasos no tienen por qué darse exactamente de esta manera, ya que todo dependerá del tipo de fundas utilizadas, así como del caso individual de cada paciente.
