Alginato en Odontología: ¿para qué se usa?

 Uno de los materiales que más útiles resultan dentro del mundo de la odontología es el alginato, el cual lo emplean los dentistas en consulta a diario. Lo cierto es que aunque la gran mayoría de los pacientes no suelen reconocer este material simplemente por su nombre, es un elemento que todos ellos han visto alguna vez en sus revisiones con el dentista. El alginato es una pasta que tiene gran cantidad de sabores y de colores distintos, y el cual se introduce dentro de la boca del paciente para poder obtener un molde de su dentadura. Dicho material se extrae de las algas, y tiene múltiples esos, entre ellos, la fabricación de cremas o incluso ciertos tipos de detergentes. En lo referido a odontología, el alginato sirve para obtener un molde de los dientes de los pacientes y tomar impresiones de su boca. De esta manera, se obtiene información relevante a la hora de realizar ciertos tratamientos en el futuro.

alginato en odontología

Formas de utilizar el alginato 

El alginato tiene una serie de usos que es importante conocer:

  • La mezcla del alginato: En Odontología, este material se encuentra en forma de polvo. De esta manera, al mezclarlo con agua se obtiene la textura adecuada para poder trabajar con él correctamente. Lo ideal es que su textura no sea ni muy espesa, ni tampoco muy líquida, pues de otra forma, no se podrían tomar las impresiones adecuadamente. En estos casos, lo más aconsejable es conocer el tipo de estructura previamente a colocarlo en las piezas dentales del paciente. Muchas veces, los dentistas utilizan máquinas mezcladoras para llevar a cabo este proceso de forma correcta. No obstante, también es posible realizarlo manualmente, utilizando un recipiente y una espátula, aunque esto es mucho más lento y tedioso para el profesional.
  • La elección de la cubeta de impresión: Previamente a tomar las impresiones, es importante escoger el tipo de cubeta que resulte más adecuada para cada persona. Para ello, será fundamental estudiar las medidas y las dimensiones que tiene su boca, tanto en la arcada superior como en la inferior.
  • La toma de las impresiones: Para realizar este procedimiento, será importante contar previamente con la cubeta de impresión, de forma que esta se introduzca en la boca del paciente. Posteriormente, solo habrá que esperar unos pocos segundos hasta que el material se endurezca para poder retirarlo. De esta manera, quedará la marca de los dientes.
  • El vaciado de las impresiones: Cuando ya se ha realizado la impresión, es importante vaciar la cubeta. Para ello, solo hay que mezclar agua con yeso y batir ambos materiales, para lo cual será muy útil contar con una vibradora de escayola que elimine cualquier grumo que se haya formado. De nuevo, este proceso puede realizarse tanto a través de máquinas como de forma manual, aunque esta última es menos recomendable. Y, una vez se obtiene una mezcla consistente, ya se rellena la cubeta para que el molde cubra la réplica de las piezas dentales del paciente. Habrá que esperar aproximadamente quince minutos hasta que esta se seque por completo, de forma que posteriormente se utilice el modelo obtenido para recrear la dentadura. Será a raíz de este molde cuando se puedan planificar correctamente las distintas técnicas que necesite el paciente dependiendo de su caso y sus necesidades.

Tipos de tratamientos que requieren de alginato

Como ya se ha mencionado, el alginato es un material que se utiliza para tomar impresiones dentales de la boca de cada persona para poder programar el tipo de tratamiento más adecuado. Por este motivo, es importante destacar cuáles son estos tratamientos y por qué el alginato es tan importante para llevarlos a cabo:

  • Tratamientos de prótesis: El alginato no solamente es excelente para poder fabricar diferentes aparatos relacionados con el mundo de la ortodoncia, sino que también se puede utilizar para el diseño de diferentes prótesis dentales, sin importar si estas son parciales o totales. Este es el caso de las dentaduras postizas, las cuales son de gran ayuda para aquellas personas que han perdido todas o la mayoría de sus piezas dentales.
  • Tratamientos de ortodoncia: Este material puede utilizarse para poder ejecutar cualquier tipo de tratamiento que esté directamente relacionado con la ortodoncia, incluyendo todo tipo de aparatos: brackets tradicionales, de zafiro, alineadores Invisalign, etc. La toma de las impresiones, por norma general, se suele llevar a cabo en las fases iniciales de los estudios, o lo que es lo mismo, en la fase que tiene el objetivo de planificar el tratamiento. De esta manera, se podrá colocar la ortodoncia posteriormente, ya que el dentista encargado de realizar el proceso ya contará con una réplica de la boca del paciente. Lo cierto es que esto será de gran ayuda a la hora de valorar la posición inicial en la que se encuentran las piezas dentales, de manera que se puede empezar a planificar cuáles son los movimientos que se desea hacer en ellos para su posterior colocación. Por otra parte, las impresiones también servirán tanto para la fabricación como para el diseño de los aparatos dentales que se crearán de forma individual según las necesidades de cada paciente. Este es el caso de algunos de los tratamientos de ortodoncia más conocidos que existen, como por ejemplo los brackets linguales o los alineadores Invisalign.

Actualmente, el alginato ha conseguido evolucionar considerablemente dentro del mundo de la odontología, algo que ha facilitado bastante el trabajo a los dentistas a la hora de realizar ciertas técnicas. Las impresiones dentales son elementos fundamentales dentro de este mundo, ya que permiten conocer las dimensiones y la estructura de la dentadura de los pacientes. Así, se consigue que el procedimiento sea exitoso, al adaptarse a la perfección a las necesidades que tiene cada persona. El alginato es un material fundamental, especialmente en todo lo que se refiere a las prótesis y a los aparatos de ortodoncia, y por eso es conveniente que los pacientes lo conozcan de primera mano para poder evitar todas las dudas que puedan surgir antes de someterse a cualquier tratamiento.