La relación entre la enfermedad de las encías y el alzheimer ha sido objeto de investigación en los últimos años. Varios estudios han sugerido una conexión entre ambos problemas. La principal teoría en este sentido es que la inflamación crónica causada por la enfermedad de las encías puede desencadenar una respuesta inflamatoria en el cerebro y contribuir al desarrollo del Alzheimer.
Asimismo, las bacterias presentes en las encías afectadas pueden acceder al torrente sanguíneo y viajar al cerebro. El cuidado adecuado de las encías y la prevención de la enfermedad periodontal son importantes para mantener la salud cognitiva a largo plazo. No obstante, es una relación que aún se sigue investigando.
Salud de las encías
Las encías juegan un papel muy importante en la salud bucal. A veces nos centramos única y exclusivamente en el cuidado de los dientes, pero lo cierto es que no podemos dejar atrás nuestras encías.
Unas encías sanas actúan como una barrera protectora para los dientes y los tejidos de soporte. No en vano, son las responsables de mantener los dientes bien firmes y sujetos a la mandíbula y proteger las raíces dentales de cualquier daño. Si las encías no están sanas, se expone la raíz y se produce dolor y sensibilidad dental.
Por otro lado, las encías sanas previenen la acumulación de sarro y placa bacteriana. Cuando las encías están inflamadas o tienen bolsas periodontales, se convierten en el hábitat perfecto para las bacterias. Estos elementos nocivos son los que, precisamente, provocan enfermedades periodontales como la gingivitis y la periodontitis. Dos trastornos que dañan los tejidos de soporte de los dientes y que suelen llevar a la pérdida de piezas dentales.
Tener las encías sanas es fundamental para disfrutar de una mejor salud en general. Hay diversos estudios que no solo demuestran la relación entre la enfermedad de las encías y el alzheimer. También se ha demostrado una relación entre los problemas de encías y enfermedades cardíacas, diabetes y complicaciones en el embarazo. Ten en cuenta que las bacterias que se acumulan en las encías pueden acceder a la sangre y llegar a otras partes del cuerpo.
¿Cómo saber si tengo unas encías sanas?
Las encías sanas suelen tener un color rosado claro. En caso de presentar una coloración roja intensa, es probable que tengas un problema en ellas. Lo mismo sucede si observas inflamación o sangrado al cepillarte los dientes o usar hilo dental. Estos síntomas son un claro indicativo de que tienes una enfermedad en las encías.
A su vez, las encías sanas poseen una apariencia firme y se hallan bien adheridas a los dientes. Si notas que las encías se están alejando de los dientes, quedando la raíz expuesta, es muy probable que sufras lo que se conoce como recesión gingival o retracción de las encías.
Pero además de por su aspecto visual, hay otras sensaciones que pueden indicar la presencia de una enfermedad de las encías. Si están sanas, no vas a tener ningún dolor ni una molestia en ellas. Pero si experimentas algún signo de dolor o sensibilidad al comer o cepillarte los dientes, lo más probable es que tengas una enfermedad periodontal.
El mal aliento persistente (halitosis) es otro síntoma de encías poco saludables. Las bacterias que se acumulan en las encías y los dientes son las causantes de este mal olor. En este sentido, es muy importante que mantengas siempre una óptima higiene bucal usando cepillo, hilo dental y antiséptico para eliminar las bacterias y restos de comida.
Finalmente, la presencia de pus o abscesos alrededor de los dientes es un claro síntoma de infección y enfermedad en las encías. Si notas alguna protuberancia o hinchazón con pus en las encías, debes acudir a P&P Clinic para que podamos revisar tu caso. Recuerda que la primera visita que hagas a nuestro centro es totalmente gratuita.
Bacterias de las encías al cerebro
Las bacterias que afectan a las encías no solo pueden tener efectos perjudiciales para la salud bucal. Numerosos estudios científicos vienen demostrando una estrecha relación entre la enfermedad periodontal y diversos trastornos neurológicos, entre ellos el Alzheimer.
Las bacterias que se acumulan en la boca y las encías forman la placa bacteriana. Estas bacterias causan daños y una inflamación crónica en toda la zona que se conoce con el nombre de periodontitis. Es, precisamente, esta enfermedad periodontal la que permite que las bacterias accedan a la sangre y se dispersen por todo el cuerpo, llegando incluso al cerebro.
Los estudios científicos que mencionamos sugieren que las bacterias periodontales aumentan el riesgo de desarrollar trastornos cerebrovasculares y problemas neurológicos. Sin ir más lejos, estas bacterias suelen desencadenar una respuesta inflamatoria en el cerebro que causa daños en los tejidos y contribuye al deterioro cognitivo de la persona.
Asimismo, las bacterias de las encías pueden influir en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas. Los resultados de algunos de estos estudios muestran la presencia de bacterias de las encías en pacientes de Parkinson y Alzheimer, por lo que tienen un papel muy importante en el desarrollo y la progresión de estas enfermedades.
Por todo esto, es muy importante mantener siempre una buena higiene bucal para prevenir la acumulación de bacterias en las encías. Como acabamos de ver, pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas.
Gingivitis, ¿factor de riesgo para el Alzheimer?
La gingivitis es una enfermedad periodontal que se caracteriza por la inflamación de las encías a partir de la acumulación de placa bacteriana. Para muchos, se trata de un problema aislado de salud bucal. Sin embargo, recientes investigaciones están demostrando que podría ser uno de los factores de riesgo a la hora de desarrollar Alzheimer.
El Alzheimer es una enfermedad degenerativa crónica que afecta a la memoria, el pensamiento y el comportamiento. La causa exacta de este trastorno no se conoce, pero sí se ha descubierto que la inflamación crónica y la anormal respuesta inmune del organismo juegan un papel muy importante en su desarrollo.
Son ya varios los estudios que han relacionado la gingivitis con el Alzheimer. Las personas con gingivitis presentan niveles más altos de marcadores inflamatorios en el cuerpo, entre ellos la proteína C-reactiva y la interleucina-6, dos elementos que también se encuentran en porcentajes elevados en pacientes con Alzheimer.
No obstante, hay que señalar que estos estudios aún son incipientes. Por tanto, no podemos afirmar aún que la gingivitis sea una de las causas de aparición del alzheimer. La genética, la edad y el estilo de vida se encuentran entre los principales factores de riesgo de este trastorno. Se requiere profundizar aún más en estas investigaciones para poder asegurar al 100% que la gingivitis es un factor de riesgo del Alzheimer.
Cuidados especiales y prevención
La salud de las encías, como venimos comentando, es fundamental para mantener una sonrisa saludable y el bienestar general.
Uno de los principales motivos por los que cuidar las encías es prevenir la enfermedad periodontal. Una afección que afecta a la estructura de soporte de los dientes y que ocasiona incluso la pérdida de la pieza dental si no se trata adecuadamente. Esta enfermedad está causada por la acumulación de placa bacteriana y sarro en dientes y encías.
La gingivitis es otro de los problemas por los que cuidar bien tus encías. Un trastorno que se caracteriza por tener las encías inflamadas, enrojecidas y sangrantes. Si no se trata, puede desencadenar una periodontitis y daños irreversibles en el tejido de soporte de los dientes.
Unas encías saludables contribuyen, además, a una óptima masticación y a una correcta pronunciación. A su vez, brindan protección frente a la sensibilidad dental y a los problemas de retracción de las encías.
La FDI World Dental Federation publicó el Libro Blanco sobre prevención y tratamiento de las enfermedades periodontales para la salud bucodental y la salud general. Una publicación que proporciona información muy precisa sobre la prevención, el cuidado y el tratamiento de las enfermedades periodontales.
Extremar higiene
La higiene bucal es fundamental para mantener una boca sana y prevenir enfermedades. En la mayoría de las ocasiones, nos centramos casi en exclusiva en el cepillado. Pero es muy importante también que puedas prestar especial atención a la higiene de tus encías.
El primer paso será cepillar las encías suavemente con un cepillo de cerdas suaves. Una tarea que ayuda a eliminar los restos de alimentos y la placa bacteriana que se haya podido acumular en toda esta zona. El cepillado deberá hacerse mediante movimientos suaves y circulares, evitando ejercer demasiada presión para no dañar los tejidos gingivales.
Además del cepillado, no olvides el uso del hilo dental para limpiar los espacios interdentales y aquellos lugares a los que no llega el cepillo. El hilo dental elimina la placa y los restos de alimentos que hayan podido quedar a lo largo de la línea de las encías. Lo más recomendable será usarlo una vez al día y antes de dormir.
Un enjuague bucal antibacterial es otro de los productos indispensables para la higiene bucal. Los enjuagues ayudan a eliminar por completo las bacterias nocivas que causan las enfermedades periodontales. Te recomendamos que uses un enjuague bucal sin alcohol para no resecar las encías.
Por último, es fundamental que acudas de forma regular al dentista para que podamos evaluar el estado de tu boca. Las revisiones dentales periódicas nos permiten identificar de forma temprana cualquier problema en tus encías. Una detección a tiempo puede ser clave para encontrar la mejor solución.
Curetaje dental
El curetaje dental es un procedimiento indispensable para el cuidado y la prevención de las enfermedades de las encías. Un tratamiento que consiste en la eliminación de la placa bacteriana y el sarro acumulados en las bolsas periodontales, es decir, en los espacios que se forman entre los dientes y las encías.
La placa bacteriana está formada por restos de alimentos y bacterias que se adhieren a los dientes y las encías. Si no se elimina de forma adecuada, se endurece y se convierte en sarro, dando lugar a una enfermedad periodontal con el paso del tiempo. Una enfermedad que afecta a las encías y que lleva a la inflamación, el sangrado y la pérdida de piezas dentales.
El curetaje dental se realiza mediante una serie de instrumentos conocidos como curetas. Estas herramientas nos van a permitir eliminar la placa bacteriana y el sarro de manera precisa. Durante el tratamiento, raspamos suavemente la superficie de las raíces de los dientes y alisamos todo para retirar las bacterias y promover la cicatrización de las encías.
Un tratamiento que resulta muy recomendable en casos de enfermedad periodontal avanzada. En esta situación, las bolsas periodontales se han profundizado y es difícil acceder a ellas con la higiene oral habitual. El curetaje dental permite eliminar las bacterias que se han acumulado en esta zona.
Por último, con el curetaje dental prevenimos los riesgos en aquellas personas que tienen las encías sanas. Así pues, es un tratamiento tanto para pacientes con enfermedad periodontal como para los que tienen una higiene bucal adecuada.
¿Qué puedo hacer para proteger mis encías?
La higiene bucal es, en definitiva, el aspecto más importante a la hora de mantener la salud en tus encías. Para ello, debes cepillarte al menos dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves y pasta dental con flúor. Junto al cepillado, has de usar hilo, cinta o seda dental y un enjuague bucal antiséptico para eliminar por completo las bacterias y restos de alimentos.
Uno de los hábitos nocivos que deberías abandonar para la protección de tus encías es el tabaco y el consumo de alcohol. No en vano, ambos elementos aumentan los riesgos de padecer una enfermedad periodontal. El humo del tabaco posee una serie de toxinas que se acumulan en la boca y las encías.
Cuidar tu dieta es otra de las tareas que debes proponer para disfrutar de una salud bucal más estable. En este sentido, tu dieta debe ser rica en vitaminas y minerales. Te recomendamos el consumo de alimentos ricos en vitamina C, tales como frutas y verduras, ya que estos fortalecen los tejidos de las encías. A su vez, debes limitar en lo posible los alimentos azucarados.
Por último, y no menos importante, hay que programar visitas periódicas a tu dentista. Ven a P&P Clinic para que podamos revisar tu boca. En caso de tener algún problema, determinaremos el diagnóstico y el tratamiento más adecuado. Somos especialistas en tratar todo tipo de enfermedades de las encías.
