Manchas en los dientes de leche: ¿Cuáles son sus causas?

A las piezas dentales que todavía no son definitivas se les conoce comúnmente como “dientes de leche”, debido al esmalte blanco que tienen en su superficie. Lo cierto es que estos dientes tienen un color bastante más claro que los definitivos, aunque también es posible que este se comience a oscurecer con el paso de los años debido a diferentes factores. Incluso muchas veces pueden salir manchas en la superficie. Por eso, es importante conocer de primera mano todas estas causas y saber cómo se puede solucionar este problema para que no se agrave con el paso de los años.

manchas en los dientes

¿Por qué los dientes de leche tienen manchas?

Lo cierto es que el esmalte de los dientes puede cambiar por gran cantidad de razones diferentes, aunque la más común es debido a las manchas que aparecen en la parte más superficial. Las tonalidades pueden ser desde marrones hasta amarillas, y pueden encontrarse tanto en una única pieza dental como incluso en varias. Por supuesto, el origen de esto puede ser muy variado, aunque existen algunos factores clave que conviene mencionar:

  • Golpes o traumatismos excesivamente fuertes que han terminado afectando a la pulpa dental, también conocida como nervio.
  • Una higiene oral insuficiente, o que no se lleva a cabo de la manera correcta.
  • Tomar unos medicamentos concretos que hacen que se oscurezcan las piezas.
  • Factores hereditarios y genéticos.
  • Un consumo de flúor demasiado intenso, sobre todo en edades tempranas.

Una vez se conocen todas estas causas, es importante desarrollarlas de manera individual para poder comprender mucho mejor cuál es el papel que realizan en la aparición de manchas en los dientes de leche.

Golpes o traumatismos

Cuando un niño recibe un golpe muy fuerte o traumatismo, lo más probable es que la pieza que ha recibido el impacto se ponga mucho más oscura que las demás. Esto es debido a que el golpe afecta de forma directa al nervio, haciendo que el tejido se inflame y que incluso se pueda provocar la muerte del propio nervio, al menos en los casos más graves. Cuando se dan estas situaciones, el niño experimentará cambios en la coloración de sus dientes, haciendo que estos se vean amarillos o marrones. Por ello, es importante acudir cuanto antes a cualquier especialista, de forma que pueda evaluar el caso de manera individual e indicar la solución más adecuada. Es importante recalcar que el tratamiento va a depender enormemente de cómo sea la lesión de severa, aunque el objetivo principal del dentista siempre será evitar que se produzca inflamación. Los dientes de leche, al ser mucho más delicados, son bastante más sensibles de caerse y de no ser especialmente resistentes ante los golpes. Es por esta razón que cuando un niño sufre un traumatismo, debe acudir cuanto antes al dentista para que este problema no vaya a más cuando este sea un adulto y tenga todas las piezas definitivas.

golpes o traumatismos

Higiene oral insuficiente

Los niños son los pacientes más propensos a contraer caries, y esto es debido en gran parte a que sus hábitos de higiene oral diarios no son los más adecuados. Además de contar con una buena alimentación que no tenga demasiados azúcares y que incluya frutas y verduras, será importante cepillarse los dientes de manera correcta después de cada comida. En caso de no seguir estos hábitos, lo más probable es que el niño termine teniendo caries, las cuales afectarán enormemente a la tonalidad que tengan sus piezas dentales. El papel de los padres será fundamental, y es importante que cuando estos vean manchas en los dientes de sus hijos, los lleven al dentista cuanto antes para que este evalúe si existen caries, y pueda indicar el tratamiento que resulte más adecuado. Si esto no se consigue coger a tiempo, el color de la mancha se oscurecerá con el tiempo, afectando al nervio y haciendo que los dientes definitivos también se puedan ver afectados.

higiene oral insuficiente

Ingesta de ciertos medicamentos

A veces las manchas que tienen los niños en los dientes pueden deberse a tomar unos medicamentos que son los responsables de que sus piezas se oscurezcan. Entre ellos, destacan sobre todo aquellos de carácter pediátrico que tienen una concentración muy alta en hierro. Por ello, para poder eliminar dichas manchas, bastará con llevar a cabo una profilaxis, siempre y cuando esta la realice una persona especializada. Así, se podrá recuperar o por lo menos aclarar el tono de la pieza dental que ha sido afectada, de manera que no solamente se eviten complicaciones en el futuro, sino que además tengan un aspecto mucho más agradable estéticamente.

ingesta de ciertos medicamentos

Factores hereditarios

En algunas ocasiones, el hecho de que los niños tengan los dientes de leche más oscuros de lo habitual puede deberse a causas relacionadas simplemente con la genética, o con familiares que también sufren este problema. Esto es algo que se puede comprobar fácilmente si se acude a un dentista de confianza.

factores hereditarios

Exceso de flúor

A pesar de que el flúor es uno de los grandes aliados para combatir las caries dentales, lo cierto es que cuando este se consume de una manera excesiva, se puede terminar originando la fluorosis, una alteración tanto del color, como de la estructura y el esmalte de los dientes definitivos. Dependiendo de la gravedad de cada caso, el paciente podrá desarrollar manchas marrones o amarillas, en los casos más severos. Además, existen dos consecuencias que conviene tener en cuenta: la primera, es una predisposición enorme a padecer caries. La segunda, es que estéticamente los resultados serán mucho más desagradables en el aspecto externo del paciente. No obstante, la fluorosis es bastante sencilla de tratar, ya que únicamente se necesita llevar a cabo o bien un blanqueamiento dental, o incluso las carillas, dependiendo de los gustos de cada persona.

exceso de flúor

En cualquiera de todas estas situaciones, lo más adecuado es, como ya se ha mencionado anteriormente, acudir al dentista cuanto antes en cuanto el niño presente manchas en los dientes o una tonalidad más oscura de lo normal. De esta manera, se podrá intervenir a tiempo, y se evitarán problemas cuando este entre en la edad adulta y tenga sus piezas definitivas.