El slow dentistry se puede definir como un enfoque innovador dentro de la odontología. Un concepto que se basa en ofrecer a los pacientes una atención mucho más detallada y minuciosa. Dejamos atrás, por tanto, la idea de realizar los tratamientos de forma rápida y poco personalizada.  La idea es que nuestros pacientes merecen una atención individualizada. Los dentistas deben tomarse el tiempo necesario para comprender las necesidades únicas de cada paciente antes de iniciar cualquier tratamiento. 

Por tanto, este concepto se centra en la calidad de la atención en lugar de la cantidad de pacientes atendidos en un solo día. Por eso, nuestros dentistas de P&P Clinic educan a sus pacientes en salud oral y les muestran todas las opciones de tratamiento que tienen a su alcance. El objetivo principal es que todo aquel que se acerque a nuestra clínica se sienta cómodo y relajado. 

Slow Dentistry

Slow dentistry, ¿cuál es la filosofía?

La filosofía del slow dentistry se basa, pues, en un enfoque totalmente centrado en nuestros pacientes. Gracias a ella, valoramos tanto la calidad del tratamiento como la experiencia del paciente. Un movimiento que busca alejarse del modelo de odontología convencional en el que los tratamientos se realizan en serie sin considerar las necesidades y preferencias de los pacientes.  En la práctica, el slow dentistry se refleja en un tratamiento más pausado y personalizado. Escuchamos a nuestros pacientes, les explicamos todas las opciones de tratamiento y respondemos a las dudas y preguntas que puedan tener. De esta manera, se fomenta la confianza y la empatía con el dentista para lograr una mayor satisfacción del paciente. 

Por otro lado, la filosofía slow dentistry también se centra en la prevención y la promoción de la salud bucodental a largo plazo. En nuestra clínica, educamos a nuestros pacientes sobre la importancia de una buena higiene dental y los hábitos saludables. Además, realizamos revisiones periódicas y tratamientos preventivos. 

En definitiva, el slow dentistry es un procedimiento que busca enfocarse en el paciente y en su bienestar integral. Una filosofía que valora la calidad por encima de la cantidad y que trata de fomentar una relación de confianza entre el dentista y el paciente. La Revista Española de Odontología publicó en 2018 el estudio Slow Dentistry: una filosofía para la atención dental centrada en el paciente. En él, podemos conocer un poco más sobre los entresijos de esta filosofía y sus efectos positivos en los pacientes. 

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Preguntas frecuentes sobre el slow dentistry

Para entrar en más detalle sobre la filosofía slow dentistry que ponemos en práctica en P&P Clinic, te indicamos a continuación para quién está dirigida y cómo se lleva a cabo. Creemos que, de esta manera, se consiguen reducir los tiempos de espera y se evita la sobrecarga de citas para mejorar la calidad de nuestros servicios. 

Consejo P&P Clinic
El "Slow Dentistry" es una técnica que no ofrecen en todas las clínicas, por eso es buena idea que te cerciores de que aplican esta técnica antes de ir.

¿Para quién está dirigida la odontología slow?

En primer lugar, hay que resaltar que la filosofía slow dentistry en odontología está especialmente indicada para todas aquellas personas que buscan una atención dental más personalizada y centrada en el bienestar del paciente. No en vano, la idea de esta filosofía es que la calidad del tratamiento y la satisfacción de las personas es más importante que la velocidad a la que se realiza.  En P&P Clinic nos centramos en la atención al paciente como individuo. Para nosotros, es fundamental la comunicación con la persona para que comprenda todos los aspectos del tratamiento. Queremos dejar bien claro todos los procedimientos que se llevarán a cabo, los posibles resultados e incluso los tratamientos alternativos.  La filosofía slow dentistry se enfoca también en reducir el estrés y la ansiedad asociados con los tratamientos dentales. Buscamos que el ambiente en nuestro centro sea cómodo y relajado y utilizamos tecnología de vanguardia que minimiza el dolor. Por tanto, es ideal para todas aquellas personas que sufren odontofobia o miedo de acudir al dentista. 

En el año 2016, el doctor Velasco-Ortega publicó el estudio Odontofobia: Revisión bibliográfica. Avances en Odontoestomatología. Este es uno de los estudios más relevantes en castellano en el que podemos conocer un poco más sobre la odontofobia. Por otro lado, la filosofía slow dentistry es especialmente útil para los pacientes con necesidades especiales. Hablamos, por ejemplo, de aquellas personas con discapacidades físicas o cognitivas, quienes puedan encontrar en este concepto un ambiente mucho más cómodo y relajado para su atención dental. Finalmente, hay que decir también que es muy beneficiosa para aquellas personas que requieran de tratamientos más complejos o duraderos en el tiempo. La atención centrada en el paciente de la filosofía slow dentistry garantiza que el tratamiento se realice de forma mucho más segura y efectiva. 

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Slow dentistry, ¿si es “slow” significa que es lenta?

El término slow puede llevar a engaño, ya que puede sugerir lentitud. Sin embargo, a lo que se refiere en realidad es a una práctica más reflexiva y consciente por parte del profesional en salud dental. De hecho, en lugar de apresurarse para realizar un tratamiento lo más rápido posible, los dentistas que se basan en la filosofía slow dentistry brindan un cuidado más individualizado y personalizado para cada paciente. Lo que hacen, en definitiva, es tomarse el tiempo necesario para escuchar las preocupaciones de cada persona. 

El ambiente que se disfruta bajo este concepto es mucho más relajado y cómodo. En ningún caso, por tanto, hablamos de una atención lenta, sino más bien enfocada en atender todas las necesidades de los pacientes. El objetivo es explicarles todo el proceso del tratamiento y ofrecerles diversas opciones para que puedan tomar una decisión más acertada. 

En definitiva, la filosofía slow dentistry no es lenta porque se tome más tiempo para completar el tratamiento. Lo que hacemos es escuchar, comprender y atender las necesidades individuales de cada uno de nuestros pacientes. De esta forma, podemos brindar una atención dental de la más alta calidad y un ambiente más relajado y cómodo. Algo que, por otra parte, va a repercutir en una menor durabilidad y costes en los tratamientos.