Cuando una persona muestra demasiada encía a la hora de sonreír, se produce lo que se conoce como sonrisa gingival, y supone un problema estético bastante grande para quienes la tienen. Por ese motivo, en la actualidad existen una serie de técnicas que ponen solución a esta imperfección. Estas son relativamente sencillas de llevar a cabo y los resultados que ofrecen generalmente son bastante positivos, por lo que su demanda ha aumentado considerablemente. La sonrisa gingival hace que se muestre una cantidad bastante desproporcionada de encía. A un gran porcentaje de los pacientes les suele suponer un problema en cuanto a su apariencia externa se refiere, y por eso deciden someterse a tratamientos que puedan corregirla para tener un aspecto físico y una sonrisa más armónica.
Motivos por los que se produce la sonrisa gingival
Existen una serie de factores que son los principales responsables de que se muestre mucha encía al sonréir, destacando cuatro por encima de todos:
- Labio superior corto: A los pacientes que tienen los labios superiores demasiado cortos les ocurre que estos se desplazan hacia arriba de forma excesiva, de manera que terminan exponiendo la encía más de lo que querrían.
- Una erupción inadecuada: Se da cuando parte de la corona que tiene el diente queda completamente cubierta por la encía. Esto suele darse cuando ocurre alguna anomalía durante el proceso de la erupción de las piezas dentales.
- Posición dentaria demasiado baja: Significa que los incisivos superiores apenas han tenido contacto con los inferiores, lo que ha terminado derivando en una sobreerupción de los primeros.
- Maxilar largo: En estos casos, se produce un sobrecrecimiento del maxilar superior que va en sentido vertical, y el cual puede ser el principal responsable de que se produzca la sonrisa gingival.
Concretamente, ¿qué es la sonrisa gingival?
Lo cierto es que la estética depende bastante de la percepción de cada persona, y lo que algunos pueden considerar poco armónico, a otros sí que les puede agradar. Esto es algo que ocurre frecuentemente con la sonrisa gingival, donde aquellos que la tienen no están conformes con ella, y quieren ponerle una solución definitiva. No obstante, primero es importante saber qué se considera exactamente sonrisa gingival. En el caso de las mujeres, esta se daría cuando la encía está expuesta unos tres o cuatro milímetros. Por otro lado, en los hombres se considera sonrisa gingival si se muestran más de dos milímetros de encía. Teniendo en cuenta toda esta información, será importante saber que la sonrisa gingival no es ninguna patología, ni tampoco una enfermedad, y no tiene consecuencias negativas para los pacientes a nivel de salud. Únicamente puede resultar poco estética para algunas personas. Existen algunos pacientes que incluso creen que la sonrisa gingival puede ser motivo de problemas de carácter periodontal en el futuro, aunque esto realmente no tiene posibilidades de ocurrir a no ser que la encía esté expuesta de una manera mucho más exagerada de lo que se considera habitual
Soluciones para la sonrisa gingival
Cuando ya se conocen todos los motivos por los que se produce la sonrisa gingival, y de qué se trata esta exactamente, es importante conocer también las diferentes formas de poder solucionarla de manera definitiva:
- Labio superior corto: Para estos casos, lo más importante es alterar la diferente acción que tienen los músculos del propio labio a través de una serie de infiltraciones de toxina b . Estas se encargarán de evitar que se ejerza demasiada fuerza en dichos músculos, de manera que el paciente no tenga que preocuparse de que este se eleve cuando se ría. Este tipo de tratamiento ayuda a la persona con sonrisa gingival a mostrar mucha menos encía, además de que también permite corregir los posibles defectos o imperfecciones estéticos derivados de tener unos labios superiores cortos o que se mueven excesivamente.
- Una erupción inadecuada: Cuando se da esto, el tipo de procedimiento más adecuado debe tener carácter quirúrgico. No obstante, los pacientes no tendrán nada de lo que preocuparse, pues este será de lo más sencillo y efectivo. Una persona que tiene una erupción pasiva alterada o inadecuada provoca que los dientes sean demasiado cortos debido a algún tipo de anomalía. Esto hace que en lugar de haber una pieza dental, se encuentre la encía. Por ello, para corregir esta imperfección es necesario recurrir a una gingivectomía, que básicamente se trata de contornear la forma que tiene la encía para poder descubrir aquella parte del diente que debería verse. Este tratamiento no solamente es rápido y eficaz, sino que también tiene pocas contraindicaciones, y la recuperación es bastante amena al no dejar cicatriz.
- Posición dentaria demasiado baja: Cuando los incisivos superiores no tienen contacto con los inferiores, esto significa que se está produciendo una posición dentaria baja. En estos casos, no es necesario que el paciente se someta a ningún procedimiento quirúrgico, sino que simplemente hay que llevar los dientes a la posición que les corresponde a través de un tratamiento de ortodoncia. Para ello, habrá que recurrir siempre a un auténtico profesional de la materia, de forma que se pueda garantizar que los resultados finales van a terminar siendo positivos para los pacientes.
- Maxilar largo: En las situaciones donde los pacientes tienen unos maxilares excesivamente largos en proporción a su cara, entonces es necesario comenzar con una cirugía ortognática, un tipo de tratamiento quirúrgico que se encarga de modificar los huesos de la cara para poder colocarlos en una buena posición. Este proceso consistirá en llevar a cabo una serie de cortes en los huesos que permitan mover el maxilar superior para poder moverlo hacia arriba de manera vertical.
Lo cierto es que independientemente del tratamiento al que se sometan los pacientes que quieren corregir su sonrisa gingival, los resultados serán bastante satisfactorios, ya que es un tipo de problema de carácter únicamente estético y que tiene fácil solución. De esta manera, podrán eliminar gran cantidad de complejos y estar más seguros de sí mismos.