Blancorexia: La Obsesión por los Dientes Muy Blancos

En la actualidad hay una gran preocupación por la apariencia y el aspecto físico, por lo que no es de extrañar que la mayoría de personas sueñen con tener una sonrisa perfectamente alineada que le aporte armonía a su rostro. Sin embargo, muchas veces esto pasa a ser una obsesión que puede acarrear problemas, sobre todo cuando la persona en cuestión comienza a recurrir a tratamientos dañinos y poco recomendables para tener los dientes blancos. A esto se le denomina blancorexia, y es una adicción que debe tratarse a tiempo antes de que las consecuencias sean irreparables.

Blancorexia: Una Tendencia en Aumento

La realidad es que los blanqueamientos dentales se encuentran hoy en día en la vanguardia de tratamientos estéticos. La razón principal son los excelentes resultados finales que se obtienen, además de que la propia técnica es poco invasiva y se lleva a cabo de una manera sencilla y rápida. Sin embargo, para las personas que sufren de blancorexia, este método se les queda muy corto.

Esta obsesión por conseguir que las piezas dentales se vean lo más blancas posible, muchas veces hace que el paciente comience a someterse a procedimientos que no están recomendados por profesionales y que pueden terminar afectando gravemente a su salud bucodental. Una persona que padece este problema tiene una percepción errónea de la tonalidad real que tienen sus dientes, por lo que las expectativas que tienen con respecto a cambiarse el color no son realistas. Ello hace que terminen recurriendo a tratamientos de blanqueamiento dental de manera excesiva, o que incluso prueben técnicas poco recomendables.

La realidad es que unos dientes sanos ni siquiera son completamente blancos, pero mucha gente lo desconoce, por lo que terminan desarrollando blancorexia. En estos casos se debe tener mucho cuidado, además de acudir a un profesional que pueda ponerle fin cuanto antes.

Cómo Identificar la Blancorexia

Los distintos métodos existentes para blanquear los dientes están muy solicitados en la actualidad, ya que como bien se ha comentado anteriormente, hoy en día existe una gran preocupación por la estética entre la población. Estos procesos generalmente son muy beneficiosos en lo que respecta a la apariencia física, y no provocan ningún daño siempre que se lleven a cabo por un profesional y en su justa medida. No obstante, cuando una persona recurre a ellos más veces de los que se considera adecuado, esto podría significar que existe un primer síntoma de blancorexia.

Asimismo, hay una serie de comportamientos que se pueden observar en este tipo de pacientes, entre los cuales destacan sobre todo los siguientes:

• Búsquedas constantes en Internet sobre cuáles son las mejores formas de blanquear las piezas dentales.

• Preocupación excesiva por qué los dientes sean cada vez más blancos.

• Negación de respetar los espacios de tiempo que deben existir entre un procedimiento y otro.

• Visitar a varios especialistas para poder recibir varios blanqueamientos dentales en distintas clínicas.

• Tener una conducta negativa o mostrar insatisfacción ante los resultados del blanqueamiento.

En caso de presentar cualquiera de estos signos, conviene acudir cuanto antes a un profesional, bien relacionado con la salud oral, o psicológica. Así, esta complicación podrá detenerse a tiempo.

Factores que Contribuyen al Desarrollo de la Blancorexia

Una vez detectadas las conductas anteriores, se debe evaluar a la persona en cuestión para poder determinar el origen de esta obsesión, y el origen de la misma. Para ello, es necesario acudir a un especialista en psicología.

Asimismo, existen una serie de factores que pueden influir en que la preocupación por tener una sonrisa con dientes totalmente blancos se multiplique:

• Un deseo de imitar a las celebridades, las cuales muchas veces lucen una sonrisa que no corresponde en absoluto con la realidad.
• Una promoción excesiva de publicidad con productos de blanqueamiento dental que ni siquiera han contado con la supervisión y aprobación de especialistas formados.
• Falta de datos sobre los peligros que existen a la hora de utilizar productos destinados a dejar los dientes más blancos.

Dientes Muy Blancos: Una Obsesión Estética

Es muy complicado a día de hoy el no verse influido por la gran cantidad de personas famosas, publicidad y promoción que se hace constantemente con respecto al físico, y a tener una sonrisa “perfecta”. Ello hace que sea mucho más sencillo terminar sintiendo obsesiones como es el caso de la blancorexia. Este trastorno hace que la persona en cuestión no tenga la percepción real del color de su sonrisa, y que además de llevar a cabo múltiples blanqueamientos dentales, nunca se encuentre satisfecha con los resultados obtenidos.

Por este motivo, terminan optando por otras opciones mucho más peligrosas y que no están controladas por expertos. Así, se producen enormes daños en las piezas, haciendo que no solamente se vean afectadas a nivel estético, sino también en su funcionalidad, pues estos métodos las debilitan.

Riesgos Asociados con la Obsesión por los Dientes Muy Blancos

Muchas personas que padecen blancorexia terminan recurriendo a remedios caseros, además de tratamientos llevados a cabo en clínicas. Dichos remedios no están en absoluto aconsejados, pues no tienen ni punto de comparación con tratamientos profesionales que sí que han tenido una supervisión y cuyos resultados positivos han sido comprobados un buen número de veces.

Asimismo, pueden terminar ocasionando graves daños a la salud bucodental del paciente, pues estos productos blanqueadores tienen compuestos químicos que afectan a las capas internas de los dientes. Con esto se consigue aclarar su tonalidad, pero también debilitan la pieza, además de que aumentan el riesgo de que estas puedan desprenderse y perderse de forma definitiva.

Métodos para Conseguir Dientes Muy Blancos

La realidad es que la única forma realmente segura que existe para que la sonrisa sea completamente blanca, es visitar a un dentista de confianza para que este indique el tratamiento más adecuado, y el tiempo que se debe dejar hasta someterse a uno nuevo. Además de esto, una forma de mantener los dientes algo más blancos es manteniendo unos buenos hábitos (como evitar el tabaco), no ingiriendo bebidas o alimentos que puedan teñir las piezas dentales, y manteniendo una buena higiene dental completa.

En ningún caso se deben realizar remedios caseros, ni tampoco comprar kits de blanqueamiento dental, ya que no están supervisados por los expertos y pueden dañar y debilitar el esmalte.

Manejo y Prevención de la Blancorexia

Tratamientos para la Blancorexia: ¿Cómo Manejar la Obsesión?

Para poder controlar esta preocupación excesiva por tener los dientes blancos, existen una serie de pautas que los pacientes pueden seguir:

• Esperar los tiempos necesarios entre un tratamiento y otro: Para que un blanqueamiento dental llevado a cabo por un dentista profesional sea completamente efectivo, es necesario que el paciente espere los meses necesarios hasta someterse al siguiente. De esta manera, se conseguirá que hagan efecto, y no se producirán daños en la boca.
• Acudir a un profesional: Esto se aplica tanto a la hora de iniciar un procedimiento que pueda blanquear los dientes de una manera segura y adecuada, como para tratar la obsesión por tener una dentadura muy blanca. En estos casos, se recomienda enormemente recibir ayuda de carácter psicológico.
• No emplear remedios caseros: Es uno de los aspectos más importantes, como bien se ha comprobado. Son excesivamente agresivos, y pueden causar graves daños a la salud bucodental de la persona afectada.
• Aceptar el color de los dientes originales: Seguramente sea lo más difícil, ya que hay que hacer un gran trabajo en quererse a uno mismo tal y como es. El caso de tener unos dientes blancos no es una excepción. Por ello, el paciente debe tener muy en cuenta que, si bien la tonalidad de las piezas dentales depende de múltiples factores, esta nunca es blanca del todo. Además, es muy habitual que el color se oscurezca con el paso de los años, así como a raíz de comer determinados alimentos, beber algunas bebidas, y otros hábitos. Y, por supuesto, se debe entender que esto no es necesariamente malo y que no siempre es un punto negativo a nivel estético.

Educación para la Prevención de la Blancorexia

Para poder evitar este trastorno, lo primero que hay que hacer es trabajar la psicología y autoestima del paciente. Esto es lo que va a ayudar a que no sienta esa preocupación tan intensa por cómo se ven sus dientes, o que directamente los acepte tal y como son. En este tipo de situaciones, es muy recomendable acudir a un psicólogo especialista en la materia que pueda ayudar a la persona afectada a ganar otra perspectiva. Por supuesto, los dentistas también juegan un papel importante, ya que pueden informar de los múltiples peligros que la blancorexia puede acarrear si no se frena cuando se debe.

De igual manera, puede ser de gran ayuda contar con un círculo de personas (familiares, amigos, etc.) que ayuden al paciente a aceptarse tal y como es, y convencerle de que su sonrisa es bonita independientemente de que tenga los dientes más o menos blancos.