Cómo mantener unas encías sanas

Para poder tener unas encías sanas, primero es fundamental saber de qué se tratan exactamente las encías. Estas constituyen la parte más carnosa que se encuentra dentro de la boca, es decir, un tejido que se debe cuidar especialmente debido a que es esencial para la salud bucodental. Las encías recubren ambos maxilares y se encargan de proteger la raíz dental de cualquier golpe o agresión que se pueda dar en esta zona. A su vez, las encías se caracterizan en dos clases diferentes que conviene tener en cuenta:

  • La encía marginal: Es aquella que menos se ve, una parte blanda y bastante sensible con la que se tiene que tener especial cuidado.
  • La encía adherida: Se trata de la encía que limita con las piezas dentales y que se puede ver con facilidad al sonreír.

Una vez que se conocen los tipos de encías que hay, es importante saber las enfermedades que se pueden producir, así como los cuidados que se deben llevar para poder contar con una buena salud bucodental.

Encías sanas

Enfermedades de las encías

Lo cierto es que las infecciones más comunes de las encías suelen ser las más conocidas por los pacientes:

  • La gingivitis: Es una enfermedad que destaca por el sangrado e irritación excesivo de las encías, y que también puede generar halitosis a quienes la padecen. No obstante, esta es relativamente fácil de tratar si se coge a tiempo. En caso contrario, podría derivar en una periodontitis o piorrea, la cual podría desatar incluso la pérdida total de las piezas dentales.
  • Periodontitis: Es la enfermedad avanzada y resultado de no haber conseguido curar a tiempo una gingivitis. Esta infección, como ya se ha mencionado, podría desencadenar que las piezas dentales se cayeran si no se consigue tratar, por lo que en caso de presentar cualquier tipo de síntoma, es necesario acudir al dentista cuanto antes. Este profesional será quien se encargue de solucionar el problema a través de un curetaje, es decir, la eliminación del sarro solidificado que penetra en el interior de la encía y que puede causar graves daños en la raíz de los dientes.

¿Cómo cuidar las encías?

Para poder controlar todos los problemas que se pueden desarrollar con respecto a las encías, lo fundamental será contar con una buena limpieza bucodental, algo que también es vital para prevenir todo tipo de enfermedades dentales. Cuando no se siguen unas rutinas de higiene diaria adecuadas, entonces se propicia la aparición de placa bacteriana, que supone la acumulación de todos los alimentos que se quedan en los recovecos de la boca después de comer. Cuando estos restos no se consiguen eliminar, esto hace que se produzca el sarro, el cual ya no se consigue eliminar únicamente con el cepillado, sino que ya se necesitaría una profilaxis dental profesional.

El hecho de que todas estas bacterias se acumulen en la boca puede desencadenar gran cantidad de problemas y complicaciones, además de que puede derivar también en la pérdida total de las piezas dentales.

Por este motivo, será fundamental fortalecer la zona de las encías para que estas se mantengan sanas, siempre a través de una limpieza adecuada. Esta no solamente se limitará a un buen cepillado, sino también a la combinación con otros elementos como es el caso del enjuague bucal, la seda dental o incluso cepillos interdentales. También será importante escoger un cepillo adecuado, con cerdas suaves, así como adoptar una técnica que no sea demasiado agresiva, pues de lo contrario se podría ocasionar el sangrado de las encías.

Por otro lado, cuidar la alimentación y adoptar unos hábitos de vida sano también será una cuestión fundamental. En el caso de la propia alimentación, lo más adecuado sería mantener una dieta rica en vitaminas, ya que esto será fundamental para que las encías se mantengan completamente sanas. Por otro lado, existen otros nutrientes  ( concretamente las vitaminas C y K) que conviene consumir. Esto puede hacerse fácilmente a través de alimentos como el kiwi. Además de esto, contar con una alimentación que sea rica en vitamina B2 será clave para que las encías se inflamen. Por supuesto, no se puede olvidar que el calcio también es vital, así como evitar a toda costa alimentos demasiado duros o pegajosos.

Mantener encías sanas en caso de tener ortodoncia

Muchos pacientes se preguntan cómo pueden mantener unas encías sanas si cuentan con una ortodoncia. Lo cierto es que, en general, es mucho más complicado mantener una buena higiene cuando se lleva aparato, ya que la limpieza tiene que ser más exhaustiva al ser más fácil que los restos de comida se acumulen en la boca. Por ello, dependiendo de la ortodoncia o prótesis que tengan los pacientes, se deberán tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • En caso de tener ortodoncia: Los aparatos fijos, como ya se ha mencionado, hacen que la limpieza oral sea bastante más complicada. Por este motivo, es bastante frecuente que los pacientes que llevan este tipo de ortodoncia padezcan algún tipo de sensibilidad dental o inflamación excesiva en las encías. Por ello, los profesionales recomiendan utilizar cepillos interproximales, ya que estos son perfectos para poder eliminar la placa bacteriana. Esto no ocurre con las personas que tienen aparatos removibles, como es el caso del Invisalign, ya que estos se pueden quitar y poner en cualquier momento, y las rutinas de higiene diaria se pueden realizar con total normalidad.
  • Prótesis dentales: Este tipo de tratamiento ayuda a los pacientes a recuperar la estética de sus dientes, además de, por supuesto, su funcionalidad. Además, hay gran cantidad de prótesis diferentes, las cuales se pueden adaptar perfectamente a las necesidades y la situación individual de cada persona. No obstante, estas pueden dar problemas también a la hora de llevar a cabo la limpieza dental, por lo menos en el caso de las prótesis fijas. Si el paciente tiene una removible, entonces ocurrirá como con el aparato Invisalign, y no habrá problemas para las rutinas de higiene diarias. A pesar de ello, existen unos cepillos especialmente pensados para las prótesis, y los cuales están totalmente recomendados por los profesionales.

A modo de conclusión, podemos reiterar la importancia de tener una rutina de higiene en casa para mantener unas encías sanas.

Y no solo eso, sino que es igualmente relevante acudir al menos una vez al año al dentista para que el profesional verifique el buen estado de tu boca.