¿Qué es la expansión ósea en implantología?

 La expansión ósea es, como su propio nombre indica, ir expandiendo de manera progresiva la cresta del hueso cuando esta es demasiado estrecha. Es un tipo de técnica que se puede realizar fácilmente a través de la elasticidad de la que dispone la estructura ósea. No obstante, es importante que esta sea de por lo menos 3 milímetros de grosor. Así, gracias a este procedimiento se pueden poner implantes en aquellas zonas que hayan quedado excesivamente estrechas debido a una pérdida cada vez mayor del hueso. Así, las piezas dentales pueden recuperar su funcionalidad perfectamente, sin olvidar también su aspecto estético. 

¿Qué es la expansión ósea en implantes dentales?

 Cuando a un paciente le faltan dientes, se produce lo que se conoce como el fenómeno de la atrofia ósea, que consiste en la falta de estímulo sobre el hueso por parte de las piezas dentales. Cuando esto ocurre, puede ser bastante complicado insertar los implantes, ya que el espesor óseo que existe es excesivamente reducido. Por este motivo, para poder colocarlos se debe aumentar el espesor del propio hueso a través de la expansión ósea. Esta será la encargada de proporcionarle un espesor suficiente como para poder colocar los implantes, y que el paciente pueda continuar con su vida normal realizando actividades tan cotidianas como la propia masticación. Y, como ya se ha mencionado, también habrá una considerable mejora en el aspecto externo.

¿Cuándo se indica este procedimiento?

 Muchas veces surgen problemas con algunos implantes dentales, no tanto en lo que se refiere a la altura del hueso, sino a su grosor. Cuando la cresta ósea es demasiado fina, es muy complicada la colocación del implante, ya que esta terminará quedando en el aire debido a que dicha cresta será excesivamente estrecha. Por ello, la técnica de expansión es tan importante en estos casos, ya que se encarga precisamente de expandir el hueso para facilitar la colocación del implante. La estructura ósea cuenta con una elasticidad concreta, haciendo que 2 o 3 milímetros puedan llegar a convertirse en 5. Es un tipo de protocolo que tiene que pasar por una serie de fases para ser llevado a cabo de la manera correcta, pero que es de gran utilidad para los pacientes que no cuentan con demasiado hueso.

Técnicas de expansión ósea

 Algunas de las técnicas de expansión ósea que existen son las de ensanchamiento a través de osteótomos, que se suele llevar a cabo en aquellas situaciones donde el hueso no es suficientemente ancho para poder soportar el diámetro del implante. Esta técnica ayuda a producir un ensanchamiento de manera controlada, de manera que la colocación de dicho implante pueda ser posible. Por otra parte, también existen los procedimientos mixtos, que se suelen realizar en aquellas zonas que tienen una anchura menor. Este proceso consiste básicamente en emplear osteotomos en las zonas estrechas donde la cresta se ensancha, de manera que se consiga una superficie mucho mayor.  

Expansión ósea maxilar

 La expansión ósea maxilar se ha convertido en una alternativa ideal para tratar a aquellos pacientes que no tienen suficiente superficie ósea. Este tratamiento consiste en crear una fractura controlada de los huesos para crear espacio suficiente y poder colocar los implantes dentales. Ello ofrece múltiples ventajas, sobre todo en lo que se refiere a poder recuperar la funcionalidad de los dientes y realizar actividades diarias con total normalidad.

La expansión del maxilar se puede realizar de dos maneras distintas: la primera, es la rápida, y se logra a través de expansores fijos que se colocan en los primeros molares y premolares. Por otra parte, la expansión lenta se lleva a cabo colocando una aparatología que pueda desarrollar fuerzas ligeras. Esto ayuda enormemente a que los pacientes puedan colocarse un implante dental y volver a recuperar la funcionalidad de sus dientes. Por este motivo, la expansión maxilar se ha convertido en una alternativa cada vez más demandada en la actualidad. 

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Qué es la cresta maxilar?

 La cresta maxilar es uno de los componentes dentro de la boca que se encuentra dentro de la parte frontal de la mandíbula, y sirve para garantizar un punto de unión para el denominado músculo milohioideo. Además, también actúa como protector de las glándulas salivales, y permite que la mandíbula se mueva hacia abajo. Este movimiento forma parte de la capacidad que tiene el paciente tanto de masticar y tragar, como de poder hablar, y por eso cobra tanta importancia. Además de esto, todos los cambios que se producen en la superficie de la mandíbula ayudan a otros músculos a que los dientes puedan triturar adecuadamente los alimentos antes de ingerirlos.

¿Cómo es la cresta alveolar?

 La cresta alveolar es uno de los dos componentes o extensiones de la mandíbula que existen, no solamente en el techo de la boca, sino también en la parte inferior. Un buen porcentaje de esta boca se compone de paladar blando y duro, además de que contienen los alvéolos o alojamientos de las piezas dentales. Los pacientes pueden notar estos elementos si rozan la lengua sobre los dientes superiores, o justo debajo de los inferiores, ya que son superficies cubiertas de estas pequeñas crestas. La cresta alveolar es la superior, y se sitúa precisamente por detrás de las piezas dentales frontales superiores.

¿Qué es el lecho alveolar?

 Los procesos alveolares son aquellos elementos que forman parte de los huesos maxilares, tanto el superior como el inferior, y corresponden a esas porciones de dichos huesos. Estos rodean y contienen los alvéolos dentarios, que son un tipo de cavidades en forma de cono. Además de esto, también se encargan de alojar diferentes raíces dentro de los elementos dentarios. Es importante saber que el hueso alveolar está formado con la propia pieza dental, además de que es el encargado de sostenerlo cuando este trabaja. Por este motivo es importante mantener este elemento en buen estado, sobre todo utilizando unas técnicas de limpieza diaria adecuadas.