Voy a llevar Invisalign: ¿me dolerá?
A pesar de la gran cantidad de alternativas de aparatos de ortodoncia que existen en la actualidad, lo cierto es que el más demandado por parte de los pacientes es, sin duda, el Invisalign. Esto es debido a que está compuesto por unas férulas transparentes, las cuales son totalmente imperceptibles a simple vista, y se puede quitar y poner con total facilidad. Por supuesto, su discreción y ventajas a nivel estético son los aspectos que más suelen atraer a la mayoría de los pacientes, además de que también cumplen su cometido en lo que se refiere a la funcionalidad, exactamente igual que los brackets metálicos tradicionales. Sin embargo, es bastante normal que surjan ciertas dudas con respecto a este tipo de tratamiento, y por eso es importante consultarlas para no tener ninguna duda a la hora de comenzar a llevar este aparato.
Una de las preguntas más frecuentes que los pacientes se suelen hacer con respecto a Invisalign, es si este es doloroso, tanto en su colocación, como a la hora de llevarlo puesto. Lo cierto es que estos alineadores no duelen en absoluto, además de que son los que menos molestias producen con respecto al resto de aparatos de ortodoncia. Lo único que los pacientes pueden sentir es unas ligeras molestias que solamente duran unos pocos días, y que una vez se pase el periodo de adaptación, ni siquiera se notarán.
Las molestias de Invisalign
El tratamiento de Invisalign es el que menos molesta de todos al basarse en unas férulas transparentes que se pueden poner y quitar en cualquier momento, y las cuales se cambian aproximadamente cada dos semanas. Esto supone una ventaja muy considerable con respecto a las ortodoncias fijas, ya que es muchísimo más cómodo y no existen arcos ni ligaduras que puedan provocar rozaduras o hacer heridas. Por supuesto, en lo que se refiere a la higiene, estas férulas se pueden quitar sin problema para comer y también para lavarse los dientes, de manera que los restos de comida no se quedan entre los dientes y se evita la acumulación de bacterias y el desarrollo de enfermedades bucales.
Algunas de las desventajas más grandes que tienen los brackets metálicos tradicionales, es precisamente que tienen alambres que se sueltan y se clavan en las encías y en los labios, provocando gran cantidad de heridas muy desagradables. Además, al estar permanentemente en contacto con la lengua, también hay muchos roces en esta zona, cosa que no ocurre en absoluto con Invisalign. A pesar de que dichas heridas y rozaduras se pueden curar fácilmente a través de cera dental de ortodoncia, lo cierto es que siempre es preferible no sufrir dolores en ningún momento. Por esta y otras razones, los pacientes suelen decantarse por Invisalign frente a los aparatos de ortodoncia fija. Además, estos alineadores no producen molestias al realizar micromovimientos muy ligeros que proporcionan unos resultados muy estéticos, y además, no provocan dolor a los pacientes en el proceso.
Ventajas de Invisalign
A pesar de que, como ocurre con todo, Invisalign tiene ciertas desventajas, lo cierto es que sus aspectos positivos son mucho más numerosos. Es por esto que tiene tanto éxito entre los pacientes, especialmente en los últimos años. Entre algunas de las múltiples ventajas que tiene este aparato, se pueden destacar las mencionadas a continuación:
- Es muy práctico: El hecho de que sea un tipo de ortodoncia removible ya hace que sea enormemente atractivo para los pacientes, ya que se lo pueden poner y quitar en cualquier momento con total facilidad. Esto es especialmente útil no solamente a la hora de llevar a cabo la higiene diaria, sino también para poder acudir a actos sociales sin preocuparse del aparato, o incluso para poder comer de una manera mucho más cómoda.
- Se puede hablar sin problemas: El hecho de que Invisalign no afecte al habla también es un factor a tener en cuenta, ya que muchas personas se quejan de tener dificultades para poder pronunciar ciertas palabras con ortodoncia fija. Esto no ocurre con estos alineadores, aunque sí que es cierto que hay que pasar por un periodo corto de adaptación.
- Es mucho más higiénico: Como bien se ha comentado anteriormente, las férulas de Invisalign también permiten quitárselas tanto para lavarse los dientes como para comer, lo que hace que la higiene diaria pueda llevarse a cabo mucho más fácilmente. No obstante, los pacientes deben recordar que es necesario lavar el aparato una vez se retira, ya que así se evita la acumulación de bacterias y suciedad.
- No se necesiten restricciones en la dieta: Este es probablemente uno de los aspectos que más agradecen los pacientes, ya que al contrario de lo que ocurre con la ortodoncia fija, cuando una persona lleva Invisalign no debe evitar ningún alimento. Sin embargo, en el caso de los brackets, sí que es importante prescindir de productos como kikos, bocadillos, o comer ciertos alimentos a mordiscos. Con Invisalign, estas restricciones no son necesarias, aunque sí es importante tener cuidado con la ingesta de chicles y bebidas muy calientes cuando se tienen los alineadores puestos.
- Es mucho más estético: Esta es otra de las razones de peso por las cuales los pacientes se suelen decantar por Invisalign, ya que a nivel estético, son los aparatos más estéticos que existen actualmente en el mercado. A pesar de que no son 100% invisibles, sí que son imperceptibles a simple vista, por lo que otras personas no notarán que está puesto.
Conclusiones
Los tratamientos de Invisalign son un tipo de ortodoncia de lo más completa que se ha conseguido ganar la confianza de gran cantidad de pacientes en todo el mundo, no solo por los excelentes resultados finales que ofrece, sino también por su enorme comodidad. Estos alineadores no solamente ayudan a los pacientes a conseguir una sonrisa de lo más armónica y estética, sino que también harán que estos se sientan cómodos durante el proceso, y que no tengan que sufrir ninguna molestia con rozaduras, heridas y un largo etcétera.
